jueves, 21 de octubre de 2010

Análisis de NBA 2K11

El año pasado, NBA 2K10 le pasó la mano por la cara a su rival más directo NBA Live 10. No es que el juego de EA fuese malo, pero los chicos de 2K Sports han logrado desde hace unos años tal grado de excelencia con su franquicia baloncestística que es muy difícil pillarlos. Este año parecía que esta rivalidad podría acabar, pues el simulador deportivo de EA prometía grandes cambios de jugabilidad.

Sin embargo, parece que los designios del destino –o sencillamente el tener problemas para terminar el juego a tiempo- hicieron que EA se retirase de la lucha y atrasase indefinidamente su NBA Elite 11 hasta alguna fecha de 2011. Así, sin rivales en el horizonte, NBA 2K11 lo tendrá más fácil para calar entre los usuarios. Aunque visto lo visto quizás no le hubiese hecho falta, pues con NBA Elite o sin él, 2K11 es, probablemente, el mejor videojuego de baloncesto que ha habido hasta la fecha.

Nadie dijo que ser como Jordan fuese fácil

La gran novedad de este año en 2K11 es el gran protagonismo que se le da a Michael Jordan. El mítico jugador no se ha prodigado en videojuegos los últimos años, negándose a ser su imagen, pero esta tendencia ha cambiado en NBA 2K11 ya que no sólo ilustra la portada, sino que se le dedican modos completos. Un gran acierto por parte de 2K Games, y es que estoy convencida que aunque hubiese salido a tiempo NBA Elite 11 el gran reclamo que supone Jordan hubiese hecho vender más al simulador de 2K.

Cómo ser Michael Jordan
Cómo ser Michael Jordan

Dentro de los modos Jordan, la joya de la corona es El Desafío Jordan, en el que nos ponemos en la piel de ‘Air’ durante 10 partidos clave de su carrera deportiva en los Chicago Bulls. Su debut contra los Boston Celtics (donde entonces jugaban Larry Bird o Dennis Johnson), el regreso de Jordan tras su coqueteo con el béisbol en un partido histórico contra los NY Kicks o la mítica final contra los Utah Jazz en la que hizo la canasta clave en el último segundo son sólo algunos de estos partidos de leyenda.

Podrían parecer pocos desafíos para un modo completo, pero nada más lejos de la realidad, pues la dificultad de cada uno de estos partidos es muy elevada. No se tratará de ganar sin más, sino de cumplir unos requisitos muy rígidos y casi irreales, como un partido en el que habrá que anotar lo friolera de 69, encestar varios triples, conseguir un buen puñado de asistencias o marcar 30 puntos sólo en el primer cuarto. Con todo ello lo que se conseguirá es imitar, lo más posible, la proeza de Jordan en cada uno de estos partidos.

La dificultad aumenta más si cabe, pues a diferencia del modo Mi Jugador donde sólo debemos preocuparnos de llevar a nuestro alter ego, aquí, como en los modos clásicos, hay que controlar a todo el equipo. Esto significa que hay que hacer mucho uso de la estrategia, pues para lograr los objetivos de Jordan –sí, esta friolera de puntos los debe anotar el solo- deberemos usar con mucha cabeza al resto de jugadores, sobre todo para dar asistencias o defender nuestra canasta (hay varios retos que pasan por evitar que X jugador enceste determinada cantidad de puntos). Además, tenemos todas las opciones de entrenador, como las sustituciones, pedir tiempos muertos, decidir las marcaciones, etc; en este sentido podemos optar por automatizar este aspecto, y el juego actuará de forma bastante coherente con las marcaciones y los cambios.

Llevaremos a Jordan y a sus compañeros de más de una década
Llevaremos a Jordan y a sus compañeros de más de una década

El modo El Desafío Jordan es un auténtico regalo para los fans de Jordan, que creo que somos todos a los que nos gusta el baloncesto. Por eso 2K Sports ha mimado al máximo este modo, ya no sólo por el look retransmisión televisiva propio de la franquicia, sino por comentarios grabados especialmente para la ocasión con comentaristas clásicos de la NBA. Con todo esto la sensación de que estamos en históricos partidos de una época determinada se acrecienta, logrando unir la técnica y la emoción.

Más y más Jordan

Sangre, sudor y lágrimas nos costará pasarnos los 10 partidos de El Desafío Jordan, pero la recompensa merece la pena. No es otra que llevar a Jordan desde que es un rookie hasta que se convierte en una leyenda del basket. Aquí no imitaremos su carrera real, sino que nosotros decidiremos qué pasos sigue. Este modo, realmente, no aporta mucho, pues es el modo de Mi Jugador con la skin de Jordan y sus tendencias como jugador, eso sí. Aquí sí que estamos ante un modo para auténticos fanboys, aunque tiene cosas interesantes –además del propio modo en sí- como el atractivo de ver jugar en el mismo equipo o contra él a un Jordan en su plenitud con las estrellas de hoy en día como Pau Gasol, Kobe Bryant, LeBron James, Dwyane Wade o Carmelo Anthony.

Este macrohomenaje a Jordan lo complementan los Equipos Clásicos de los Bulls, que no vienen a ser otra cosa que las selecciones y equipos clásicos que hemos visto en otros juegos (recuerdo con especial cariño la selección de Allstars de las décadas de los 50 a los 90 que hubo en algunos NBA Live) pero dedicados íntegramente al equipo de Michael Jordan y a sus rivales más importantes de los años 80 y 90 con las plantillas de entonces. Este modo sólo permite hacer partidos de exhibición, pero es todo un acierto para los aficionados, pues los principales jugadores están bien recreados, así como los uniformes, que van variando a lo largo de los años.

En esencia, pocos cambios

Cuando un juego deportivo llega al grado de excelencia al que llegó NBA 2K10 es difícil añadir mejoras o nuevos modos. Esta es la sensación que hemos tenido con 2K11, donde las mejoras son mínimas, pero agradecidas.

El control del juego poco ha cambiado. La base sigue estando en el control con el stick izquierdo, los botones para las opciones básicas de pase, robo, etc, el gatillo para movimientos secundarios pero imprescindibles y el stick derecho, fundamental para realizar unos tiros correctamente direccionados. 2K ha insistido mucho en el cambio en la manera de realizar los dribblings, pero éste no ha sido tan radical como cabría esperar. Seguimos usando el gatillo, sólo que ahora se combina con el stick para que no resulten siempre iguales.

Jugadas como los mates se siguen haciendo de la misma manera
Jugadas como los mates se siguen haciendo de la misma manera

Sea como fuere estamos ante un sistema complejo, que requiere de práctica y experiencia, pues más allá de las bases hay muchas pequeñas variaciones que nos permitirán hacer las jugadas más espectaculares. Y no sólo jugadas de ataque, sino defensivas, y es que la IA de NBA 2K11 no hace concesiones. Actúa de manera realista y no hemos notado ningún momento en que baje la guardia.

Por suerte, el control siempre actúa en consecuencia a la acción que realicemos: si por algo se caracteriza NBA 2K11 es porque casi nunca nos “estafa”. El único momento que podemos decir que lo hace es en pases largos, y es que cuando el juego no detecta ningún jugador cerca y no usamos correctamente el stick derecho para indicar a qué compañero queremos pasar el balón, lo que hará es interpretar el pase como lanzamiento, por lo que desaprovecharemos una jugada. Afortunadamente pasa muy pocas veces, por lo que es un error menor.

Vive la NBA

Si en temas de control las diferencias han sido menores, no así en las animaciones. 2K lo prometió, y se ha cumplido. Los movimientos no son nada bruscos, hay muchísimas transiciones, y eso no sólo se nota en el driblaje (que como decía, esperaba que hubiese evolucionado un poco más) sino en cualquier jugada que realizan nuestras estrellas. Además, por lo menos en los jugadores más conocidos, notamos más que nunca movimientos característicos, aunque la palma se la lleva el gran Michael Jordan, cuyo alter ego virtual 2K Sports ha mimado al máximo, y ver a ‘Air’ en 3D será casi casi como verlo jugar otra vez.

Espectáculo dentro y fuera de la cancha
Espectáculo dentro y fuera de la cancha

El resultado de todo esto es el videojuego de baloncesto más real que hemos visto hasta la fecha.Ya no es sólo lo que pasa dentro de la cancha, sino alrededor. Público que se mueve separadamente y no en “masas”, una mascota que no para de hacer payasadas, cheerleaders en los descansos realizando diferentes coreografías, así como toda la estética de retransmisión televisiva que tan bien le ha funcionado a la franquicia, con repeticiones de lo más destacado, momentos “patrocinados”, fotos del partido, información sobre estadísticas, comentaristas (siempre en inglés) y todo los efectos sonoros que se suele oír en partidos de la NBA. Lo único que ha variado un poco es la posición de la cámara, con un ángulo ligeramente diferente a la edición 2010, aunque la diferencia es mínima y en ambos casos cómoda para jugar.

Modos para no aburrirse

Exceptuando los modos dedicados a Jordan, no hay novedades en cuanto a otros tipos de modos, sólo se han mejorado los presentes, básicamente en lo que a opciones configurables se refiere. Entre ellos destacamos los más lúdicos NBA Blacktop (concursos de mates, triples, partidas callejeras y el 21) y Playoffs u otros realmente densos como La Asociación o Temporada. El primero es como un manager de basket, sólo que podemos controlar todos los aspectos de nuestro equipo: seremos presidente, entrenador y jugadores, todo en uno (aunque nosotros decidimos qué controlar y qué no). Este modo es mejor aún por la cantidad de información adicional y estadísticas que lo adornan, así como las actualizaciones que el juego ofrece casi en tiempo real, todo un acierto para aquellos a los que el baloncesto les parece más que encestar unas canastas.

La liga regular de la NBA consta de 82 partidos, por lo que ya os podréis imaginar que Temporada nos llevará bastantes horas de juego. De nuevo, este modo en el que llevamos al equipo de nuestros sueños está plagado de realismo tanto dentro de los partidos como fuera de ellos.

Lleva a tu equipo favorito a lo más alto
Lleva a tu equipo favorito a lo más alto

Tampoco han cambiado apenas los modos online, pero teniendo en cuenta el alto nivel que tenían, no es algo que haga bajar nota a este juego. De nuevo podemos crear, gestionar y unirnos a ligas en línea con muy variados parámetros de juego. El único problema es que esto no es FIFA 11, no hay tantos usuarios online como los juegos de fútbol, por lo que a veces habrá que tener un poco de paciencia, pero merece mucho la pena.

Por último queremos destacar el modo Mi Jugador, que ya llegó a increíbles cotas en la edición 2010. En él somos un chaval desde sus inicios en las ligas universitarias hasta su estrellato en la NBA. Para ello empezaremos creándolo, en un editor bastante completo en términos técnicos pero que aún le falta mejorar un poco en aspectos más visuales, como poder definir más el físico del jugador y, especialmente, poder crear mejores caras, pues con lo disponible ahora se logran jugadores excesivamente parecidos entre sí y bastante feúchos.

Una vez creado, no sólo tenemos que jugar los partidos oficiales, hay que entrenar para mejorar en todos los aspectos de juego, ir decidiendo de qué equipo queremos formar parte entre las ofertas que vayamos recibiendo al subir de categoría, seleccionar patrocinios, participar en ruedas de prensa... Estas últimas opciones son nuevas de este año, llevando un poco más allá este modo y haciendo que debamos controlar todas las acciones relacionadas con el deporte de nuestro crack, no sólo aquellas referentes a lo que pasa más allá de la cancha de baloncesto. En cuanto a la jugabilidad sigue siendo la misma que en 2010, con la acertada visión de la cámara que se centra más en nuestro jugador.

El modo Mi jugador es una continua toma de decisiones
El modo Mi jugador es una continua toma de decisiones

Casi inmejorable

La saga NBA 2K cada vez se gana más méritos para ser una de esas que marca una época. La edición del año pasado nos dejó con un muy buen sabor de boca, y si bien este 2K11 no nos ha producido el mismo impacto, estamos ante un mejor juego de baloncesto ¿Por qué? Hay detalles pequeños que han mejorado el conjunto, y aunque conceptualmente los modos dedicados a Michael Jordan no son nuevos, el hecho de hacer de ‘Air’ un personaje jugable y que podamos revivir su época dorada es todo un plus en este juego de baloncesto.

NBA 2K11 sabe unir técnica y realismo con un concepto más abstracto como la magia de los grandes partidos de baloncesto; un juego que ningún aficionado al basket debería perderse.

Mejor (casi) imposible
Mejor (casi) imposible

Lo Mejor

  • Realismo extremo
  • Un control muy fidedigno
  • El modo El Desafío Jordan

Lo Peor

  • Alta dificultad
  • Que además de los modos Jordan, no haya ningún otro modo nuevo

2 comentarios:

  1. Buenas mi duda es la siguiente yo tengo el juego 2k11 pero se me a hecho un poco dficil de configurar el control si me podriar ayudar por favor les estaria eternamente agradecido me despido con un cordial saludo

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  2. deberia de ser facil de configurar los controles, no se como ayudarte lo siento

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