Resistance 3 comienza poco después del sorprendente e inesperado final de la segunda parte. Esta vez el protagonista por supuesto no será Nathan Hale (tendrás que ver el final del 2 para saber porqué), sino que el peso argumental recaerá sobre Joseph Capelli el nuevo héroe por accidente.
Han pasado 4 años desde los sucesos de Resistance 2 y Norteamérica está más infestada de Quimeras que nunca. De hecho el 90% de la población mundial ya ha sido aniquilada y las Quimeras siguen terraformando el planeta a su gusto sin una clara oposición de los humanos. En este clima de desesperanza, Capelli trata de sobrevivir y se esconde en un pequeño y polvoriento pueblo de Oklahoma, donde regresó con su mujer e hijo tras ser expulsado con deshonor del ejército. Allí tratan de vivir lo más tranquilamente que pueden sabiendo que tarde o temprano las Quimeras llegarán, es entonces cuando llega el doctor Fyodor Malikov (que ya aparecía en la segunda parte) con la promesa de haber encontrado un sistema para darle la vuelta a toda la invasión. Malikov pide la ayuda de Capelli para llegar a Nueva York, y es su viaje lo que viviremos en Resistance 3.
Insomniac Games promete un juego más intimista, no sólo en el multijugador del que hablaré más adelante, sino también en el modo un jugador, con una historia y desarrollo de luchas a distancias más cortas y menos grandilocuente. Esto significa, por ejemplo, que en realidad Resistance 3 regresa un poco al estilo de los primeros juegos de acción en primera persona, con más enemigos,más acción directa y menos presentaciones y enemigos imposibles de abarcar en la pantalla.
Otro de los detalles de Resistance 3 es que la lucha ha dejado de ser global para ser una guerra de guerrillas, con los humanos como claros perdedores. Rara será la vez que nos crucemos con algún ser que no sea una Quimera y por eso la ambientación se ha visto modificada sustancialmente con respecto a los dos anteriores juegos. Insomniac Games quiere que sintamos el desamparo humano en primera persona.
Una buena noticia es que la Campaña, el modo historia, será 100% compatible en cooperativo. Todo el juego se ha pensado en esa dirección, para compartirlo con un segundo jugador. Seguro que habrá aficionados que les resulte chocante que si en Resistance 2 había cooperativo para 8, por qué ahora se limita a dos. La respuesta es clara: mientras que en la segunda parte el cooperativo eran misiones sueltas, ajenas a la historia principal, aquí jugaremos la Campaña al completo.
Con respecto a los cambios jugables que se sepan ahora, además de una jugabilidad más clasicista, encontraremos un inventario de armas a lo grande (nada de ir con dos fusiles máximo como está de moda). El cambio de armas se gestionará con una rueda de selección, igual que en el primer Resistance. Se recuperan la mayoría de éstas, como la Bullseye o la mágnum, pero también habrá nuevas como una escopeta mutadora que convierte a los enemigos en minas explosivas.
También hay confirmados al menos dos enemigos nuevos. Unas Quimeras de largas piernas que saltan todo lo que quieren a velocidad de vértigo, flanqueándote en el tiempo que tardas en parpadear. Otro monstruo Quimera será un bruto "brawler", de fuerza y velocidad inusitada, muy resistente a los disparos y cuyos enfrentamientos nos traerán más de un quebradero de cabeza.
Como en cualquier FPS que se precie, el multijugador tiene un papel fundamental en Resistance 3. Pero hagamos repaso, si en Resistance 1 había partidas online con hasta 40 jugadores, en Resistance 2 era hasta 60… cualquiera pensaría que ahora será un modo aún más grande. Pues no, una vez más Insomniac ha optado por adelgazar el juego y el número de jugadores en multijugador se limita a un máximo de 16.
De nuevo nos explican que desean hacer un multijugador de partidas más íntimas, donde los jugadores se terminen conociendo unos a otros después de algunos rounds, y con mapas que inciten a la lucha continuada. Habrá dos equipos, humanos y quimeras, y por supuesto modos de juego por equipos, pero no es esa la intención que hay puesta en el multijugador; éste tiene un claro enfoque al juego individual, sin complicaciones y sólo por diversión. Dinero para comprar mejores armas, experiencia para subir de nivel, habilidades extra… todo a lo que actualmente estamos acostumbrados en los juegos multijugador actuales también estará incluido.
Resistance 3 es, en resumen, un regreso al juego que dio vida a la franquicia, deshaciéndose de algunas cosas que no terminaron de gustar en la segunda entrega. Con una campaña en solitario o cooperativo más profunda y de historia más íntima, un multijugador más pequeño pero más dinámico y divertido, y un buen apartado técnico tal y como Insomniac Games nos tiene acostumbrados, el nuevo Resistance promete ser uno de los FPS del año. Si te gusta el género puede que debas tener un ojo puesto en él para ver cómo evoluciona. Se pondrá a la venta el 6 de septiembre.
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