De un plumazo, con una casi perfecta producción, Treyarch se ha quitado de encima el sambenito de estudio segundón. Reconozcámoslo, aunque World at War fue un Call of Duty más que decente, Treyarch siempre ha estado por debajo de los capítulos desarrollados por Infinity Ward. Sus juegos han sido una mera comparsa, un aperitivo, un entretenimiento pasajero que los aficionados soportaban mientras esperaban los Call of Duty buenos de verdad.
Pero esta vez no es así, no señores. Motivados quizá por los recientes cambios en la vida de Infinity Ward, o empujados por las cada vez más elevadas exigencias de los usuarios, Treyarch lo da todo en su Call of Duty Black Ops, y se queda al mismo nivel (y lo supera a veces) de las producciones de la otra desarrolladora.
Así, encontramos que Black Ops como videojuego es una producción redonda y generosa. Con un modo para un jugador muy bien llevado a término, unos extras fantásticos que como buen postre acompaña al banquete, y un modo multijugador que siendo más o menos igual que el de los Modern Warfare, sobre el terreno es bastante más divertido.
Algo que sorprende bastante en Black Ops es el acusado interés por crear una campaña de un jugador que sea efectiva. Desde el mismísimo menú principal ya se intenta meter al jugador en situación, y lo consigue. La historia del juego está algo más trabajada que en anteriores Call of Duty, y nos transporta a una sala de interrogatorios donde estamos siendo torturados en primera persona. Somos Mason y quieren sacarnos una información acerca de unos misteriosos números cuyo significado desconocemos.
Este punto de partida da lugar a una elaborada y épica historia que se solapa en múltiples épocas y diferentes guerras. Aunque esta vez, en Black Ops la mayoría de misiones las protagoniza Mason, no podía faltar el salto a otros héroes y situaciones que van desde la Segunda Guerra Mundial hasta las guerras del Vietnam o Laos. La diferencia respecto a otros juegos es que estos cambios de localizaciones y enfrentamientos están motivados por la sólida historia del juego, que está cargada de incógnitas y preguntas que se resuelven poco a poco.
¿Quién es Reznov en realidad? ¿Qué son los números? ¿Cuál es el objetivo de Dragovich? Black Ops conforma una trama argumental de película que además está magníficamente hilvanada y trasladada a videojuego. Aunque cada aficionado tendrá sus preferencias, personalmente tengo la sensación que, en este capítulo, la historia y la puesta en escena es la mejor de todos los Call of Duty vistos hasta la fecha.
Las misiones y la acción no es tan frenética como en los anteriores Modern Warfare, con un ritmo que se caracteriza por ser, quizá, algo más contenido. Aunque no existen tantos momentos clímax o de tensión también disfrutaremos de escenas y niveles que se grabarán en nuestra memoria. La fuga de la cárcel rusa Vorkuta, la huída por los tejados de la ciudad de Kowloon, la infiltración por lo túneles vietcong, la avalancha de nieve en Yamantau, o el ataque en barco de Laos al ritmo de Sympathy for the Devil de los Rolling Stones, son un buen ejemplo de niveles interesantes. El juego va sorpresa tras sorpresa, atrapando al jugador con imaginativas situaciones, especialmente a partir de la mitad de juego, y esto, viendo el alto nivel de los recientes juegos de acción, es muy meritorio.
Cierto es que hay cosas que no terminan de cuajar del todo. Una de ellas ha sido la IA, que se comporta bien en la mayoría de situaciones, pero que a veces hace el tonto perdiéndonos de vista o comportándose de manera errática. La exacerbada cantidad de munición, la inmunidad de nuestros aliados o una dificultad algo más baja de lo esperado, son algunos defectos a destacar en Black Ops, y que si hace poco los apuntaba en otro juego sería injusto no criticarlo ahora.
Lo que sí queda fuera de dudas es la perfecta puesta en escena de todo el juego, con muchas más cinemáticas que en anteriores CoD, y una ingente biblioteca audiovisual de la época que se muestra en todo momento de muchas maneras.
Si nos cansamos de la Campaña o terminamos los 15 niveles que la conforman en las 6-7 horas normales, Black Ops nos ofrece mucha más diversión. El modo Zombis es perfecto para pasar unos buenos ratos muertos, ya sea solo, o en compañía. Se puede jugar a pantalla partida o por Xbox Live y en Zombis debemos, sencillamente, sobrevivir a las oleadas de estos putrefactos enemigos.
De momento parece que Zombis está en proceso de desarrollo. Sólo hay un nivel como tal para jugar, posteriormente desbloqueamos dos más, uno de ellos un juego arcade al estilo retro. Seguro que en breve publicarán más niveles a través de DLC, pero de mientras el escenario de Kino Der Toten, basado en World at War, es una buena muestra de cómo combinar un Supervivencia al estilo clásico, con un Cooperativo con profundidad.
El Multijugador es un caso aparte: con 14 niveles diferentes y 8 modos de juego -sin las variantes- la diversión es difícil que se agote. Hay una progresión por niveles de experiencia que controla donde podemos jugar (igual que en Modern Warfare) cientos de desafíos diferentes con múltiples recompensas, desbloqueo de armas, contratos para ganar dinero según los resultados, personalización de mil formas diferentes…
En general el modo multijugador está muy trabajado y bien pensado. Desde el buen diseño de niveles que ofrece mil tácticas de ataque y defensa, la diversión innata de los modos de juego elegidos, o el regreso de las rondas de juego rápidas. A medida que subimos de nivel mejoramos en retos y en partidas más grandes hasta llegar al nivel Prestigio, donde sólo compiten los mejores.
El cambio más notorio es la introducción de la nueva moneda CoD. Ahora para conseguir nuevos objetos y armas no sólo debemos alcanzar un cierto nivel de experiencia, sino que posteriormente lo deberemos comprar con el dinero acumulado. Quizá es liar un poco algo que debería ser sencillo, pero al sumar esta variable la progresión es mucho más calmada y uniforme con respecto al resto de jugadores, según nuestra opinión.
Gracias a la moneda CoD se añaden también los Contratos, desafíos sencillos (al estilo conseguir un número de bajas sin morir, ganar determinados modos de juego, matar varios enemigos con un arma determinada) que se actualizan cada día y que deben conseguirse en un límite de tiempo. Al final todo es sumar un poco más de dinero para seguir comprando. Si somos más arriesgados también está la opción de apostar nuestro dinero en partidas cerradas a ver quién es el mejor de los mejores.
Este modo de juego es, bajo nuestra opinión, bastante más divertido que Modern Warfare 2, y Treyarch demuestra que cuando se pone sabe hacer bien su trabajo. Hay, sin embargo, varios problemas iniciales, especialmente de desconexiones de partidas y pérdida de puntos. El lag también es más alto de lo que debería… Pero cuando funciona todo bien, la experiencia es muy satisfactoria. Estos fallos, hasta cierto punto comprensibles, se deberían solucionar en los próximos días, sobre todo al comprobar que juegan online más de 2 millones de jugadores.
Técnicamente el juego raya a muy alto nivel. Aprovecha de manera acertada el motor gráfico, bastante refinado ya, de Modern Warfare 2, así que poco hay que nos pueda sorprender. Black Ops luce realmente bien en ambas consolas, pero misteriosamente algunas texturas se ven mejor en una plataforma que en otra. Es muy extraño ver la ropa de un personaje muy bien texturizada en PS3 y un desastre en Xbox 360, para luego en otra escena diferente verlo a la inversa, mejor en 360 que en PS3. Lo que sí queda patente es el trabajo de iluminación, muy bien bueno y potenciado en las escenas cinemáticas, donde 360 se lleva más méritos.
En cualquier caso en ambas consolas disfrutaremos de un espectáculo audiovisual digno de elogio, con unas animaciones de personajes sublimes (más aún en las escenas pregrabadas) y unos escenarios impactantes. El doblaje al castellano es correcto, a veces muy bueno, y otras suficiente. Lo peor es que en muchas escenas se pierde la coordinación labios-voz, y queda realmente mal. Tampoco entendemos la exagerada diferencia de volumen de las voces en juego y de las escenas cinemáticas, lo que provoca que constantemente estemos subiendo y bajando el volumen del televisor o home cinema.
¿El mejor Call of Duty?
Un juego como Black Ops es un imperdible para cualquier fan del género de acción en primera persona. Es un título redondo, tanto para un jugador como en el modo multijugador. Cierto es que tiene varios defectos, como una IA no tan satisfactoria como en otros juegos, y algunos fallos del multijugador claramente solucionables mediante parche, pero como producto es tan digno, o más, que cualquier juego antes desarrollado por Infinity Ward. Muy recomendado.
Lo Mejor
- Buena historia y excelente puesta en escena
- Multijugador
- Gráficos y sonido
Lo Peor
- Leves problemas del Multijugador
- IA errónea en ocasiones
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