Donkey Kong Countri Returns, el clásico otra vez

Cuando Nintendo anunció Donkey Kong Country Returns, ya dijo que quería ofrecer un juego de plataformas a la antigua usanza. Y después de jugarlo durante horas, no puedo sino confirmarlo. Con Donkey Kong Country Returns vas a encontrar un juego de plataformas que ralla la locura de lo desafiante y difícil que es. Eso sí, cuando superas cada nivel, respiras satisfecho al conseguir superar plataformas que hacía años que no se veían.

Donkey Kong tendrá que saltar mucho si quiere conseguir todos los plátanos

Y es que Donkey Kong Country Returns no engaña en ningún momento. Primero porque el protagonista no va a salvar a ninguna princesa, el planeta o el país. Donkey quiere comer y como le han robado sus plátanos, su objetivo es recuperar todos los plátanos posibles para llenar su estomago. En lo que tampoco engaña este Donkey Kong Country Returns es que es un título de plataformas clásico, es decir, difícil, muy difícil. Cada nivel que a pasar, exige lo mejor de ti con el mando de Wii..

Pero es que además, Donkey Kong Country Returns tiene una gran virtud que no es otra que conseguir que cada nivel sea una auténtica sorpresa, con plataformas más difíciles, con desafíos más complejos y con niveles multiplano. De repente estás en la plataforma más cercana a la pantalla, de repente has ido a una que se ve a lo lejos, pero en la que hay plátanos. Por supuesto, Nintendo no sólo quería unas plataformas clásico, sino también novedades y es verdad que en este Donkey Kong Country Returns hay novedades y no me refiero a los movimientos que hay que hacer con el Wiimote, algunos de ellos bastante normales y que se han visto en otros juegos.

No, hablo en concreto a la forma de moverse de Donkey. Cierto es que Donkey nunca ha sido el mono más ágil del mundo, pero es verdad que en el juego de Wii esto se ha agudizado para ofrecer un mayor desafío a los jugadores. Así Donkey se mueve como un gorila, despacio, pesado por definirlo mejor y esto se nota continuamente. Especialmente cuándo hay que hacer un giro brusco, ya que Nintendo ha puesto especial énfasis en esa lentitud y vemos como al girar tras una carrera, Donkey tarda unos metros en frenar y volver a tomar carrerilla para seguir con el nivel. En los primeros niveles se nota poco, y no influye directamente en la jugabilidad, pero conforme avanzas en el juego, puede sufrir esta lentitud ya que me pasaba en un precipicio o al intentar subir desde un barril a otra plataforma, fallaba, porque no estaba en el lugar exacto haciendo el salto preciso.

Los clásico barriles para conseguir alcanzar más plátanos, también están aquí

Eso sí, en Donkey Kong Country Returns no estás sólo. Como en los juegos originales, está Diddy Kong que ayuda a Donkey a recuperar los plátanos. Diddy Kong tiene varias funciones que ya se vieron en otros juegos de la serie, como por ejemplo ejercer de sustituto brevemente mientras Donkey está incapacitado o llegar a puntos que no son accesibles fácilmente. En este Donkey Kong Returns lleva además un pequeño cohete a la espalda con lo que ambos simios pueden llegar a sitios que de otra forma no se podría llegar y ofrecen una jugabilidad combinada interesante.

Y aunque esto podría prestarse para un modo dos jugadores y, de hecho, Diddy Kong es, el personaje que puede llevar el otro jugador, la verdad es que no es muy efectivo. Confieso que viendo el anuncio de televisión puede parecer divertido, pero la verdad es que no lo es para quien lleva a Donkey, precisamente por lo que he comentado de sus giros lentos o de la sensación de pesadez, en el caso de Diddy esto no existe y por lo tanto, es más rápido y mejor para el jugador que lo lleva. Algo lógico pero que despeja una duda que teníamos: en realidad Donkey Kong Country Returns es un título para un jugador. Poner dos jugadores en este título es algo tan inútil como en los Super Mario Galaxy, donde el segundo usuario se limitaba a recoger estrellitas con el Wiimotes. Por alguna razón incomprensible, a Nintendo le da por forzar la jugabilidad para dos jugadores, cuando en realidad el título ha sido diseñado para un jugador.

Además es que no le hace falta a este Donkey Kong Country Returns. Es un título cuidado en todos los detalles. No sólo en la clásica jugabilidad que permite disfrutar de unos niveles excelentes. También por su cuidada estética con gráficos 3D de gran colorido y viveza visual. Las animaciones de Donkey son impresionantes y los diseños de enemigos están en la línea humorística de la saga, como podemos ver en los primeros compases de los niveles iniciales con los tiburones que tienen esa sonrisa “picarona” que se han podido ver en los dibujos animados.

También podemos adoptar con Donkey otra clase de postura

Y es que pese a que la jugabilidad es totalmente 2D, gráficamente es un juego sobresaliente en 3D que, además, juega con los múltiples planos de una manera magistral. Los desarrolladores sabían lo que esperaba el jugador de Donkey Kong y se lo dan perfectamente adornado.

Si a esto sumas además una banda sonora clásica pero con las melodías llenas de arreglos más modernos, te encuentras con un juego de plataformas que satisface a los seguidores incondicionales de la saga y atrae a nuevos jugadores al peculiar universo de Donkey Kong.

Donkey en estado puro

No me queda mucho que decir de este juego de plataformas. Acostumbrado en los últimos años a juegos de plataformas donde la máxima preocupación es donde se posiciona la cámara, volver a las clásicas dos dimensiones de los juegos de la serie Donkey Kong es aunque parezca un contrasentido, un soplo de aire fresco. Eso no implica que no sea un juego hecho con técnicas obsoletas, porque técnicamente

Donkey Kong Country Returns es un juego espectacular, con gran colorido, con modelos 3D que nada tienen que ver con el título original, sobre todo por su exquisita animación. Si a eso sumas un control preciso, pero con el hándicap de cómo se mueve Donkey, te encuentras con un título difícil y desafiante, pero que una vez acabado el nivel te va a dar más satisfacción que muchos otros juegos del género.

Lo Mejor

• Unas plataformas 2D con sabor clásico, pero técnicas nuevas
• Visualmente es un juego colorista y preciosista
• En varios momentos del juego te vas a quedar con la boca abierta

Lo Peor

• El modo dos jugadores está tan forzado que parece ridículo.