Una raza de mutantes surgidos de un fallido experimento genético, los Darkspore, pretende acabar con la paz. Su ADN trae consigo un virus que arrasa todo a su paso y cada vez están más cerca de hacerse con el dominio de toda la galaxia. Pero no toda la esperanza está perdida, pues los guerreros de la Insurgencia Crogenitor están dispuestos a pararles los pies a los Darkspore. Nosotros seremos su general, y en un action RPG con una jugabilidad parecida a la de Dungeon Siege o Diablo deberemos acabar con la amenaza vírica.
A pesar de su título, Darkspore poco tiene que ver con el Spore original de Maxis. Del juego de 2008 coge su motor gráfico y su completo editor de personajes que, si recordáis, nos permitía crear y personalizar las más variopintas criaturas. Pero si ese juego era un simulador con un componente más casual, Darkspore podría enmarcarse dentro del género del action RPG occidental, al estilo Diablo o Dungeon Siege (sobre todo este segundo, pues controlaremos más de un personaje), con la diferencia de que este título nos sitúa en ambientes de ciencia ficción en el espacio al estilo Starcraft.
En Darkspore recorreremos la galaxia en busca de las criaturas que dan título al juego, los culpables del mortal virus que se expande. Antes de aterrizar en cada planeta, podremos consultar su ecosistema, para saber qué clase de criaturas habitan allí y cuáles son sus habilidades, pues no dudarán en atacarnos a la mínima. Este estudio de la fauna del sitio en cuestión será fundamental para elegir al grupo de guerreros más idóneos en cada caso.
En el juego encontraremos tres clases de héroes. Por un lado los centinelas, que son los expertos en cuerpo a cuerpo; por otro los saqueadores, que dominan el sigilo; y por último los “tempestad”, una clase de soporte que a lo que más se acerca es al papel de los magos o sacerdotes en los juegos de rol de temática fantástica.
Además de las clases, hay las especies o “génesis”, cinco en total. Así encontramos los quantum, que pueden manipular el espacio-tiempo; los plasma, cuyos ataques se basan en el fuego y el calor; los bio, cuya energía se centra en la curación y el uso de armas biológicas; los cyber, que tienen partes robóticas; y los necro, cuyos poderes se basan en la muerte y la oscuridad.
Darkspore se centra en el trabajo en equipo, haciendo que debamos controlar a un grupo de héroes. Como hemos visto, existen tres clases de criaturas y cinco “génesis” diferentes, aunque dentro de éstas hay muchísimas variables a tener en cuenta (personajes con muchas patas, con alas, con facilidad para nadar…). Aquí surge el gran componente de juego de rol, y es que a medida que avancemos en nuestra aventura dispondremos de puntos para invertir en las habilidades y propiedades de nuestros héroes.
El sistema de combate será muy fácil de aprender, pues se basa en el uso del ratón y en determinadas teclas para ejecutar los ataques especiales. Controlaremos a un personaje cada vez, e iremos alternando de uno a otro según queramos. Respecto a los ataques especiales, en algunos casos necesitaremos que todos los miembros del equipo estén vivos para poder lanzarlos, por lo que en todo momento deberemos cuidar la salud de nuestros soldados, y aquí será vital el uso de objetos curativos. Estos y otros ítems, como en un clásico RPG, aparecen al vencer enemigos o en determinados puntos del escenario, por lo que la exploración es básica si queremos sobrevivir a los planetas que visitemos.
Darkspore nos permite vivir la aventura en solitario, pero también disfrutaremos mucho del juego en el multijugador. En total, podremos jugar ocho personas en un cara a cara en equipos de cuatro contra cuatro. Como en el modo para un solo jugador, antes de empezar la batalla seleccionaremos nuestros héroes de diferentes clases.
Los héroes combatirán en los campos de batalla que hemos ido viendo en el modo para un solo jugador, que serán muy variados, pues encontraremos planetas acuáticos, otros donde abundan los ríos de lava y otros con peligros ambientales, entre otros muchos ecosistemas. Otra cosa que influirá es el progreso del modo para un jugador, pues con él vendrán más características para “tunear” a nuestros héroes, tanto en aspecto como en habilidades.
Darkspore viene a ser la cara oculta de Spore, lo que no veíamos mientras jugábamos a ese juego. Un título que lleva mucho tiempo en la recámara, pues la idea original la tuvo Maxis (entonces liderada por Will Wright) antes que Spore, pero decidieron desarrollar primero ése por continuar con la estela casual que les fue tan bien en Los Sims. Y aquí está, por fin, prometiéndonos grandes dosis de acción y estrategia. En primavera veremos si nos da lo que promete.
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